La secuela del título de culto vuelve con cámaras fijas, atmósfera de pesadilla y una heroína dispuesta a enfrentarse a los demonios —externos y propios— que acechan en Villa Hess.
El terror ha vuelto a sus raíces, y tiene acento chileno.
Tormented Souls 2, la nueva entrega del estudio Dual Effect junto al publisher PQube, ya está disponible en PC, PlayStation 5, Xbox Series X|S y Epic Games Store, trayendo de regreso el sabor áspero, oscuro y cerebral del survival horror clásico.
Nada de mundos abiertos, ni de combate fluido. Aquí manda la cámara fija, el sonido de un pasillo vacío y el peso de cada decisión cuando solo te queda una bala.
La protagonista, Caroline Walker, despierta una vez más atrapada en una realidad que se desmorona. Su hermana Anna ha desaparecido, y la única pista la lleva hasta el pueblo minero de Villa Hess, una comunidad ficticia del sur de Chile que parece haber quedado congelada en el tiempo.
Entre ruinas, niebla y un convento con secretos más viejos que la fe, Caroline se verá obligada a cruzar la frontera entre el mundo real y “El Otro Lado”, un espacio donde el horror se vuelve tangible y las reglas de la vida —y la muerte— ya no aplican.
Cada rincón de Villa Hess está diseñado como un homenaje al terror de los noventa: cámaras fijas, puzzles intrincados, inventario limitado, monstruos imposibles.
Pero también con un aire moderno —mejor iluminación, controles más precisos y una ambientación que bebe de Resident Evil, Silent Hill y Parasite Eve, sin esconderlo, sino celebrándolo.
El juego presenta nuevos enemigos: fanáticos con cuchillas, criaturas cubiertas de percebes, cuerpos retorcidos que se arrastran por ductos o atacan en grupo. Para defenderse, Caroline tendrá acceso a armas improvisadas, como el Clavador Automático o el Cañón de Mano triple, y a una función de selección rápida, perfecta para quienes sobreviven a puro instinto.
Pero no todo será disparar. En esta secuela, las alianzas también pesan. Personajes como Joseph, un hechicero en busca del Libro de los Muertos, o Miguel, un exsoldado con misión secreta, te harán dudar de tus decisiones tanto como los monstruos.
Detrás del miedo, hay una historia sobre culpa, fe y ciencia prohibida. Una en la que las agujas, la sangre y los rituales se mezclan con el deseo de redención.
Y eso es justo lo que diferencia a Tormented Souls 2 de otros juegos de terror actuales: no solo asusta, también te hace sentir incómodo de pensar.

La desarrolladora Dual Effect, desde Chile, demuestra que el terror latinoamericano puede competir sin complejos con los grandes del género, y que las raíces de Resident Evil 1, Code Veronica o Silent Hill 2 todavía pueden florecer si se riegan con creatividad, identidad y una buena dosis de locura.
Si creciste buscando llaves oxidadas, grabando tu progreso en cintas o contando las balas una por una, este es tu llamado.
El survival horror clásico no murió. Solo estaba esperando en la oscuridad.
